Cuando los cambios empezaban a desbordarme, a tambalearme, a confundirme, aparecen esas voces mágicas, esas almas fieles, que se hacen oír siempre en los precisos momentos. Son brisa fresca, oxigeno limpio entre el smog y la prisa. Hoy aparecieron las “hadas madrinas”, justo hoy, cuando necesitaba ser traída de vuelta. Gracias.
Son las voces que nos recuerdan quienes somos, a qué vinimos, porqué estamos…Son las que nos devuelven el sentido, la fuerza, la fe.
Voy bien, despacito, pero intentando armar el ritmo en esta ciudad y en este gran desafío de ser pediatra….
Son las voces que nos recuerdan quienes somos, a qué vinimos, porqué estamos…Son las que nos devuelven el sentido, la fuerza, la fe.
Voy bien, despacito, pero intentando armar el ritmo en esta ciudad y en este gran desafío de ser pediatra….
.....el mejor de los desafío!!, que nada te enturbie, hay para descubrir otros colores
ResponderEliminarCon mucho cariño. Ruth
Hola Daniela un saludo desde Italia, que vaya bien.
ResponderEliminarhola daniela un saludo desde rengo.
ResponderEliminarleía esto que escribiste y comienzo a pensar en el valor introspectivo de los días domingo.
quería invitarte a que leyeras "día domingo sin lugar a dudas" en mi blog y también quería preguntarte una cosita pero no lo voy a hacer porque no me gustan las pederastas
chao pederasta, un abrazo. estudia.
Hola Daniela un saludo desde quilicura.
ResponderEliminar"voces"?? eso no se llama "psicosis"!!! jejeje...espero verte luego...un abrazo...
pepe
"Temeroso y exaltado a la vez el viajero entra con paso de gato en territorio ajeno. Gato de sí mismo embarcándose en su propio salto, afelpado sigilo de aventura y deriva allí donde todo es nuevo, donde todo es otro..."
ResponderEliminarJulio Cortázar (Extracto "Paris: Ritmos de una Ciudad")
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarTE QUIERO PRIMA
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