sábado, 4 de noviembre de 2017

Fractura

Había demorado en volver a ese sitio donde resonaban mis propias fracturas. La vida se sucede entre líneas a destiempos, así van asomando respuestas y sentido en una especie de rompecabezas con cientos de piezas insustanciales y otras inmensas, indisimulables, vitales. 
Había demorado en volver ¿cuánto de mí había cambiado? ¿Cuánto se había extraviado?. La sensación de regresar, atenuaba la sospecha de haberme convertido en otra cosa, esa nostalgia gris que nos separa del presente, palpar ese espacio, atravesarlo, cruzar esa brecha invisible, me devolvía a una calma única, nacida de mí misma...esquiva, improbable, fundamental... 
¿Quién era hoy yo misma? me extraviaba y había desaprendido la fórmula para volver aquí. A esta fractura donde la vida susurra con una calma  veraniega "a esto sabe estar vivos" 
Volver me daba la potencia para sospechar que bien en el fondo, seguimos  intactos. Y me alegraba que así fuera, ...que pese a las circunstancias y las  innumerables monotonías o los insospechados vértigos de los días...  pudiese regresar  a este sitio, Al fondo (o la superficie) de mi misma.