Avanzar

Volví al mar, con 29 años, ....y entonces qué?...aterrizajes, re orbitarse, encajar y volver a andar…..
Ando…sigo, avanzo, con una calma nueva, una intima calma que se apropia del ritmo, de la voz, de mis pasos, de mi mal humor, una calma ajena a esas traicioneras calmas tipo anestesias, (esas que se apoderan de nuestros domingos, y nos hace mirar los días y a la vida, como una sumatoria de horas iguales, insoportablemente iguales, que nos hacen insoportablemente inmóviles y apáticos).
No, esta calma, esta nueva calma, me hace respirar profundo, mirar a los ojos, me detiene y me pregunta; ¿vale la pena molestarse, vale de algo el mal rato?, ….esta calma que invita a tomar conciencia, claridad, optimismo.
Aterrizo, me re orbito, sintiendo que habito en tierras ricas, en un país lleno de privilegios y oportunidades, en un rincón del mundo, aun protegido de los grotescos abusos del mundo, en una tierra donde se construyen derechos, y donde podemos avanzar, …. Avanzar, siempre que aprendamos a detenernos, siempre que aprendamos a reflexionar, a cuestionar y hacer conciente, cual horizonte es el que andamos buscando.