sábado, 15 de marzo de 2008

Maña

Ya van Cuatro persona que amasan con su dedo mi frente para sacarme la maña manifiesta, no dejo de arrugar el ceño!!!, como si algo permanentemente anduviera mal, y no es que así lo sienta, no ando agobiada ni molesta, tampoco tengo razones miopes o astigmáticas que lo justifiquen (según el oftalmólogo tengo visión para ser piloto). Tan sólo me convertí en ceño fruncido, así sin querer, por costumbre, por mala costumbre, y por más que trato de hacerlo conciente y corregirlo, la arruga se resiste a abandonarme ….Acepto sugerencias………y esta reflexión tan sin sentido sólo pasa por el ocio maravilloso de tener hogar y poder mirarme sin pudor al espejo, pellizcarme la cara y reconocer: ¡¡¡cresta Dani estas envejeciendo!!!

3 comentarios:

José Bustos Barra dijo...

Heeeeeeeeee..bueno...si..en realidad te estàs volviendo màs "vieja"...pero tambièn más bella...y con caràcter...que es lo mejor...saludos...
desde..."Santiasco"...

pepe

Soledad Burgos dijo...

Prima, nada que hacer, me parece que lo más justo es que el ceño fruncido vaya acompañado de una sonrisa cusual, así te confundes y confundes a la gente y resultará siendo una cara enigmática, entonces le puedes dar nombres y bautizarlas:
-cara de baño a 1 kilómetro
-cara de aquí me las traigo Peter.
-cara de: la culpa es mía, tú eres un ángel.
- cara de análisis existencial profundo y necesario.
-cara de 28 años bien llevados.
Te quiero
Andrea

Loreto dijo...

El ceño fruncido es de siempre...lo que pasa es que a estas alturas nos preocupamos que deje marca permanente. O sea que el gesto deje de ser voluntario (digase arruguitasssssss)