Monjes

El calor es húmedo, tengo la ropa mojada, empiezo a pedalear y por fin la brisa se  siente en la piel!, refresca!!!.   El viento mueve los arboles y se deshojan como lluvia!, caen buganvilias que pintan de fucsia el pavimento, a la izquierda  bordeamos el Mekong, a la derecha el pueblo, niñas o mujeres invitando a masajes, otras abuelas tejiendo flores como ofrenda a los santuarios que se cuelgan de las esquinas de las casas, ... Niños llorando, otros jugando bajo los arboles o entre las jaulas con pajaritos que estan cada 5 o 6 casas.  

Pedaleo, olor a incienso, luego a mierda, luego a ajo.... 
Ahí respiro profundo (amo el ajo)... Mas mujeres cocinando y ofreciendo arroz en unos cestos de paja, los mismos que a las 6 am se le ofrecen a los niños monjes, puntitos naranjos por la ciudad, cabezas y cejas  calvas deambulando silenciosos de a 2 o 3 entre el templo y la Ciudad, niños cubiertos de mantos naranjos... Pienso en ellos... En su vida en templos... En su cultura... En todo lo que desconozco....en sus creencias...su paz...sus conflictos..., su infancia.... Otro mundo por comprender ..., arroz, ese que después de dárselos a los monjes, estos se lo dan a otros, mas pequeños, mendigos o niños que de rodillas y manitos juntas frente al pecho, reciben la ofrenda mirando el suelo.... Niños monjes, reciben y dan, reciben y dan....  

Respiro luang prabang.... Me bajo frente al Rio, Y escribo... Para no olvidar....para que todo esto se vuelva real....Recibir y dar, recibir y dar...