El miedo es hondo, es calmo, el miedo se parece al silencio
y a la noche, a otros ojos, a la ausencia,
a todos los abandonos . El espejo, ese
que reflejaba lo conocido, el que
mostraba quien eras, está roto, y no
queda sino cruzar del otro lado, atravesarlo, ir tras ese reflejo, entrar a ese
mundo ajeno, oscuro, que también eres y
nunca pudiste ver. …Tras ese paso, “silencio
habitado”…sigues siendo tú…Tú, aun más cerca de ese centro.
De
esta tarde quieta, tiempo sin tiempo, despierto a mi presencia. Murmulla
mi pecho tarareando arcoíris, avanzo lento y firme, los charcos reflejan el
cielo. Río, río por la vida dispuesta para mi, huelo el leño, el sorbo caliente
del mate, las arrugas, los arrayanes bailando al viento,... descanso en las
palabras, saboreando sus sonidos, el tonito y su calma....Techos humeando entre
lluvia..... Mi alma anuncia el retorno, vuelvo a habitarme, a llenarme de esa
sed de esta agua abundante, trago el presente y aquí me quedo, sin
las mañas ni los miedos, confiada, presente (suspendida en la circular totalidad)... los
pies fríos de regreso al mar y al fuego (mi centro). Las manos
abiertas a la lluvia! ...piel del mismo aislado sur, leño ardiendo, pan
caliente, tú, tú y la Confianza ... Tú, verde y fértil
confianza.... 
Quedan arrayanes en flor, los chilcos están mojados de fucsia y repletos de pájaros, las
vertientes engordan con la lluvia, cantan y enseñan a seguir, a fluir…el agua siempre susurrando! En lluvia,
en ríos, en mar..…Hay amaneceres bajo cero, escarcha y los pies se enfrían, hay días de sol, y la luz se mete en el ciprés
alegre, entusiasmada, hace bailar y todo resplandece. Hay otros de viento y
tormenta… intensos, fuertes….oscuros. 
Antes de partir de koh Phi phí, subímos a la parte mas alta de la isla, allí, casi abarcando su totalidad, su belleza era impactante. Vegetación generosa, palmeras verdes, de fondo una montaña rocosa que abraza dos playas esmeraldas. Se veía el flujo de todos los botes, líneas de las rutas navegadas los días previos.
En la proa del barco, dentro del mar, balanceándose hacia el cielo y lo profundo, golpeando fuerte contra el agua, aferrada en los cordeles del ancla....(de frente y en movimiento). Subir y bajar , subir y bajar, montada sobre este azul revuelto, horizonte de sal y cielo, salpicando su fresca lluvia....mojándome. 
Bahía de Halong, Vietnam, día gris, frío, lluvia triste. Embarcamos, vibro con el ronroneo del motor. Mi piel reconoce ese antiguo mantra, me calma y me emociona, me emociona tanto...No sé como nos atrapa el tiempo en un lugar...3 años viviendo en un barco, ...(y como nos dejamos atrapar por el tiempo en tantos años)....barandas y pisos resbaladizos...esa humedad, el olor, la sal, la inmensidad del mar, el mismo gris, frío y triste de mi eterno invierno chilote. Algo me duele dentro, me duele, y me quedo ahí, en lo extraviado, en lo antes explorado...en lo perdido... En lo que no regresa..."la nostalgia.."Me Reconozco en los recuerdos, tanta memoria en los sentidos...., como si la vida hubiese pasado por mi, supongo vendrá tanto mas para el mañana.
Reconozco mi mundo inventado...vuelvo a caminarlo y a conectar con esa vida, purificarla, recobrarla como la suma de mi misma. Quien soy.Pito de zarpe! Directo a este otro mundo, el de fuera de mi, me abrocho el salvavidas y Sonrío para la siguiente foto...El mar acuna, el mar... Hay algo mas libre y hermoso?...mas triste que el mar!!!!La lluvia es fina, tierna, como una mano sobre la cabeza....(;)Ha pasado tanto tiempo, de ese tiempo... Y acá está, Todo en mi piel!!! en ese ruido de motor ....me alucina sentir que empiezo a descongelar. Existo en capas, en profundas capas, y cada día descubro que son tantas las por reconocer... 2013 fue de naufragio y tormenta..., lo miro como ayer, y lo agradezco. (porque ya pasó y porque pude vivirlo, quiero caminar todos los caminos que me hagan ser quien soy) "aquí vienen a dar todos los vientos, todos, se desviste la lluvia".Uno finalmente debe abrir el mundo que habita, los colores que pinta, las teclas que toca, los sonidos que susurra o grita...uno ilumina desde su interior y proyecta, (me salva creerlo, por mis niños heridos, por esta generación post guerra, por tanta estupidez humana que controla el mundo, me salva creer que la luz que cada uno porta, limpia de miseria la humanidad)Supongo que rumiar la existencia es parte del viaje. Despegué la cabeza hacia el horizonte y este lugar es impactante, ....Dentro, visito el último faro habitado, me descalzo...me siento tan calmada, tan segura...gracias, gracias por iluminar..."cuando no estés serás una sed, hebra de luz en mi ser, tu ser" Bahia de Halong,
sigo en viaje.... mar adentro....
El calor es húmedo, tengo la ropa mojada, empiezo a pedalear y por fin la brisa se siente en la piel!, refresca!!!. El viento mueve los arboles y se deshojan como lluvia!, caen buganvilias que pintan de fucsia el pavimento, a la izquierda bordeamos el Mekong, a la derecha el pueblo, niñas o mujeres invitando a masajes, otras abuelas tejiendo flores como ofrenda a los santuarios que se cuelgan de las esquinas de las casas, ... Niños llorando, otros jugando bajo los arboles o entre las jaulas con pajaritos que estan cada 5 o 6 casas. 
Pedaleo, olor a incienso, luego a mierda, luego a ajo.... 
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